- Crea un espacio especial para hacer las tareas que sea cómodo y agradable para el niño, la idea es que el niño pueda tener una zona propia para realizar deberes escolares, o pasar el rato con actividades creativas como el dibujo o manualidades. La decoración del lugar se convierte en un anclaje de motivación, cuando el niño relaciona el hacer sus deberes con pasar un rato agradable y cómo para trabajar.
- Fomenta el contacto de la naturaleza y tu hijo, el aprendizaje no fluye solamente dentro de las aulas de clase, la naturaleza es un espacio donde pueden observar y experimentar lo que mejora la concentración de los niños. Las nuevas tecnologías ofrecen nuevos recursos pedagógicos en la educación, sin embargo las tecnologías son un complemento.
El contacto con la naturaleza es una necesidad esencial del ser humano y estos planes al aire libre refuerzan la creatividad y la atención. La propia naturaleza puede convertirse en un ejercicio de inspiración cuando el niño dibuja un paisaje o escribe una redacción sobre una excursión a un bosque.
- Encuentra las diferencias, así esas imágenes que a primera vista parecen ser exactamente iguales, pero que tienen algunas características distintas que el protagonista completa poco a poco. Esta observación de las imágenes también alimenta la paciencia.
- Sopa de letras, este es uno de los ejercicios sencillos que da protagonismo a la palabra. Uno de los beneficios de este entretenimiento que también puede ayudar al niño a reforzar el vocabulario, es el efecto positivo de alimentar la atención a través de las sopas de letras.
- Aparta las distracciones, para ayudar al niño en el logro de un objetivo concreto para el que tiene que concentrarse, puedes enseñarle hábitos positivos al evitar las posibles distracciones en el hogar. Uno de los más frecuentes es tener la televisión encendida. A un niño, al igual que un adulto, le cuesta más concentrarse en una tarea si la alternativa a ese ejercicio es un plan de ocio posible en el mismo lugar.
-Pintar mandalas, Otro de los planes de ocio que puede disfrutar el niño desde el punto de vista creativo es colorear mandalas. El dibujo es un componente habitual en la creatividad infantil. Pero es posible integrar novedades en esta experiencia a través del ejemplo concreto de los mandalas.
